martes, 10 de junio de 2008

51

Inundada toda imagen
De mis aguas poco profundas
Al haber cruzado los siete mares
Yo no acepto a quien juzga

Un silencio mutilante
Entre almas que quedaron mudas
Una razón para escaparme
Sin lugar a ninguna duda

La pasión tan errante
De una fe testaruda
Entre dioses cambiantes
Pecaste tú al morir desnuda

1 comentario:

Unknown dijo...

Verosimilutud. Éste relata lo que siento cuando recuerdo la primera y única vez que tuve un diálogo con quien escribe 51. Ahora tengo una fotografía.